El Ayuntamiento de Madrid pretende regular la salida de perros a la calle de forma espacial y temporal para sancionar algunas actitudes “picarescas e irresponsables”
por parte de dueños de animales que utilizan esta excepción de
movilidad contemplada en el decreto de estado de alarma. Por eso, el
Consistorio madrileño pretende regular a través de una ordenanza -como
acaban de hacer otras ciudades, entre ellas Alicante- para que esta
práctica no se convierta en un coladero que contribuya a vulnerar las
restricciones impuestas y propicie nuevos focos de contagio frente al covid-19.
El
Ayuntamiento madrileño aún no ha determinado el tiempo, aunque entiende
que no debe ser de más de 15 minutos. Alicante, por ejemplo, ha establecido que la distancia máxima de casa debe ser en torno a 200 metros y el tiempo estricto para que el animal haga sus necesidades.
Fuentes
del Ayuntamiento de Madrid entienden que hay un gran descontrol en este
asunto y que determinados comportamientos ciudadanos están generando
focos de infección que deben ser paliados con medidas más estrictas en
el marco del vigente estado de alarma. Hay ciudadanos que es escudan en
los paseos de sus animales cuando son sorprendidos por los agentes
policía local a enormes distancias de sus domicilios. Se han descubierto
a dueños con sus perros a distancias de hasta tres kilómetros de sus
domicilios.
“Hay gente que se aprovecha de esta laguna
normativa para pasear por la calle con su perro y cuando se les
preguntan qué hacen con la mascota tan alejados de sus casas esgrimen
que no hay ninguna ley que les obligue a estar cerca de sus domicilios”,
señalan. Estas fuentes entienden que el contacto con pelos de los
perros también puede ser un foco de infección y señalan que se dan casos
de dueños de perros que permiten a sus mascotas acercarse a otras.
El
Ayuntamiento de Madrid no tiene decidido aun cuánto tiempo máximo de
estancia del animal en la calle sería la recomendable y a partir de qué
distancia del domicilio puede ser sancionado el dueño del perro. Las
citadas fuentes recuerdan que los perros deben ir atados en todo
momento, los dueños deben mantener el espacio de seguridad en la vía
pública con propietarios de otros animales y que el tiempo de duración
del paseo debe ser limitado. Puede haber dueños de perros que, sin
saberlo, porten el virus y lo transmitan a otras personas mientras
pasean al animal, de ahí la importancia de la distancia de seguridad.
Fuente: El País