Me sentí un privilegiado al ser
invitado a asistir a esta fase del concurso, para que mi
desconocimiento sobre el tema ya no lo sea tanto. Y así, descubrí
algunas de las peculiaridades de esta competición, que hasta el
momento me parecía sólo un concurso bonito, donde se puede ver un
montón de pajarillos preciosos y con unos cantos alucinantes. Antes
de que Clemente, miembro de la Sociedad Ornitológica de Villaverde,
me haya introducido amablemente en los pormenores de esta disciplina,
tengo que reconocer que mi desconocimiento era casi absoluto. Ahora
que ya no es tanto este desconocimiento, puedo contaros algunas cosas
sobre estos eventos que, como todo, si se dan a conocer justamente,
se descubre lo interesantes que son en realidad y el gran trabajo que
hay detrás.
Durante estas jornadas previas, las
de liguilla, se permite el acceso público a las salas de juicio,
siempre que se guarde silencio y no se hagan movimientos bruscos. El
día de concurso definitivo, sólo el juez puede estar en la sala con
los pájaros, para que la distracción de los animales sea la mínima.
Una sobre otra, cuatro jaulas ( A,B,C,D ) se sitúan frente al
experto a una distancia prudente que no asuste a los pequeños
concursantes. Tiene 20 minutos para analizar los cantos de los 4,
diferenciando una decena de particularidades de cada uno. Básicamente
así se establecen las puntuaciones de cada ave y la media que los
entrenadores tendrán en cuenta para aplicar las correcciones que
crean necesarias. A parte de los aspectos técnicos, me quedo con la
impresión que sentí en este proceso; de un lado los 4 canarios
cantando juntos, rizando, silbando, gorjeando, haciendo silencios
sincronizados, interpretando una sinfonía de la naturaleza, que es
siempre diferente y sorprendente; del otro lado el juez, que me hizo
sentir admiración por el don que poseen quienes son capaces de
diferenciar cada matiz sonoro de las aves, sin ninguna duda, al mismo
nivel que los mejores perfumistas con el olfato, o los mejores
catadores con el olfato y el gusto, estos profesionales forman parte
de la élite de los sentidos.
Esta mañana también conseguí
entender que se juzgan dos características básicas, canto y color,
que, gracias otra vez a Clemente, supe que se dividen en otras
subcategorías, dando sentido al esfuerzo que los criadores hacen con
sus campeones para conseguir los primeros puestos.
Haber conocido un poco más las
particularidades de esta competición, que me permitan conocerla
desde dentro, me hace sentir muy honrado. Todo esto me ha despertado
el gusanillo, el entendimiento y poder comprender la cantidad de amor
que todos los que tienen algo que ver en este mundillo tienen por la
naturaleza y en concreto por las aves.
Quiero dejar constancia de un hecho
importantísimo, pues esta competición que se celebra en Villaverde,
aquí vecinas y vecinos, en nuestro distrito, puntúa y es parte de
las numerosas citas que el Campeonato Nacional de esta disciplina
programa en su calendario anual. Todo un orgullo que debe hacernos
reflexionar: ¿no seria bueno hacer una mayor, mejor y más amplia
difusión que la que se viene haciendo, que muestre aún más el apoyo
de las instituciones? ¿Cuántas competiciones alberga Villaverde que
sean parte de campeonatos nacionales oficiales?
Gracias al esfuerzo de las
Asociaciones, como la Ornitológica y Los Hogares, este evento es ya
tradicional entre seguidores y criadores de esta disciplina, que
acuden desde todo el país con las mejores aves, para hacerse con los
títulos que se ponen en juego. Conseguir que sean cada vez más
quienes se acerquen a disfrutar de este concurso, promocionará el
gusto por la naturaleza y sumará valor a Villaverde.
Gente de Villaverde, colaborador:
Julio R. E.