El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, ha criticado hoy que la alcaldesa, Ana Botella, siga sin decir cuándo abrirá como "catedral de las nuevas tecnologías" la nave Boetticher en el distrito de Villaverde.
Lissavetzky ha preguntado hoy en el Pleno a la alcaldesa "qué papel jugará la nave Boetticher en el proyecto de desarrollo de nuevas tecnologías en la ciudad de Madrid".
En su intervención, el portavoz del PSOE ha ironizado con la denominación del proyecto al decir que antes pensaba que a la antigua nave de la fábrica de ascensores Boetticher se le llamó "catedral" porque "iba a ser un faro de la innovación" pero ahora, tras 10 años, está convencido de que es "por la lentitud exasperante en abrirla a los ciudadanos y a las pymes".
"Una auténtica vergüenza esta política de la tortuga", ha comentado Lissavetzky.
En su respuesta, la alcaldesa ha explicado que el proyecto de la nave Boetticher "se hizo en un momento económico que poco tiene que ver con el actual" y que la Catedral de las nuevas tecnologías "está en la fase final de su rehabilitación" y en "los últimos trámites para la recepción de la obra".
"Estamos trabajando para poner esta gran infraestructura al servicio de los madrileños", ha asegurado la alcaldesa, que ha puesto varios ejemplos de aplicación de las nuevas tecnologías en Madrid: el pago de impuestos y otros muchos trámites de forma telemática, el nuevo pago del SER que tendrá en cuenta el nivel de contaminación del coche y de la zona, el control de túneles y el tratamiento de residuos.