A ellos se han sumado también seis asociaciones vecinales (Los Rosales, Butarque, Pau de Carabanchel, Montecarmelo, Las Tablas, Barrio de Vereda de los Estudiantes de Leganés). Los padres se quejan no solo de los retrasos en las obras de los colegios, sino también de los “engaños” de la Consejería de Educación, por los constantes cambios de fechas y de fases de las obras.
En el caso del Ausiàs March,las obras están paralizadas desde enero y acaban de adjudicarse de nuevo. La Consejería de Educación afirma que estarán listas para septiembre, pero los padres lo dudan y, además, no están de acuerdo con que solo se construya una parte del centro.
César López, del Antonio Fontán, destaca que el problema no es “puntual” sino que reside en “la forma de hacer las cosas, a cuentagotas”, explica. Las consecuencias: “Niños desplazados a otros centros o que dan gimnasia en la sala de audiovisuales que también sirve de comedor.