La primera vez que se celebra oficialmente la fecha del dos de mayo como Fiesta de la Comunidad de Madrid es en el año 1985. Poco menos de un año antes se había aprobado, por la Asamblea de Madrid, la celebración de la jornada del 2 de mayo como fiesta propia de la Comunidad de Madrid, mediante Ley 8/1984, de 25 de abril, publicada el 14 de mayo de 1984 en el B.O.C.M. (Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid) y el 29 de junio en el B.O.E. (Boletín Oficial del Estado), es decir, con posterioridad al 2 de mayo de ese año, lo que explica que la primera celebración oficial de la fiesta autonómica de Madrid no fuera organizada hasta al año siguiente.
El origen de esta festividad es, por tanto, relativamente reciente y se encuentra motivado por la necesidad que tiene la Comunidad de Madrid, instituida sólo un año antes, en 1983, cuando se aprueba su Estatuto de Autonomía (mediante Ley Orgánica 3/1983, de 25 de febrero), de ir dotándose de símbolos propios que expresen su autogobierno.
Así, la Ley 8/1984 por la que “se declara Fiesta de la Comunidad de Madrid la jornada del 2 de mayo de cada año”, lo afirma claramente en su “Exposición de motivos":
“Es parte insoslayable en el proceso de totalidad de la autonomía política madrileña, la institucionalización, bien como simple incorporación de comunes experiencias históricas o bien mediante su nuevo acuñamiento de una festividad que sirva de aglutinante a los ciudadanos de la Comunidad de Madrid.
Entre estas efemérides históricas, 2 de mayo de 1808 ocupa un lugar de honor. Ese día el pueblo de Madrid cobró un protagonismo decisivo en la historia, en la defensa de la Nación española. En esta fecha también, desde Móstoles, se lanzó por primera vez el llamamiento 'a los españoles' para que acudiesen a salvar su Nación.
Este día debe cobrar en el devenir histórico inmediato una importancia decisiva en la vida de los madrileños, como símbolo del derecho de autogobierno. Por ello, los representantes del pueblo de Madrid, de forma unitaria, expresan la conveniencia de destacarlo, como así establece la presente Ley.”
Quizás, por el relativamente poco tiempo transcurrido en términos históricos (algo más de dos décadas) desde su institución, esta festividad autonómica del 2 de mayo, además de ser un día festivo no laborable (es decir, inhábil para el trabajo, retribuido y no recuperable) tiene aún poca repercusión en la vida cotidiana madrileña.
Gente de villaverde quiere desear un Feliz día a todos los Madrileños.